El Gobierno vasco ha iniciado ya el «procedimiento de rescisión» del millonario contrato de compra de 120 coches-patrulla para la Ertzaintza modelo Seat Altea XL al grupo Volkswagen, sumido en una profunda crisis de escala mundial por el trucaje de sus motores diésel. Los vehículos adquiridos por 4,5 millones de euros (37.500 euros por unidad) tenían que haber empezado a llegar a las comisarías vascas el pasado mes de diciembre. De hecho, ya están fabricados y listos para circular, pero llevan uno de los motores alemanes manipulados para simular un mejor comportamiento ambiental y actualmente están retenidos en las instalaciones de Seat en Barcelona, sin visos de que puedan ser entregados a corto plazo. Leer más...